Angélica aún espera regreso de su esposo; uno de 17 migrantes queretanos desaparecidos en 2010

Por Armando Guerra Vázquez y Valentín Ruiz (Enviados)

LANDA DE MATAMOROS, Qro.- 9 Noviembre de 2016.- Aquí en el rincón de la sierra gorda queretana Angélica Moya sigue esperanzando a su fiel esposo, ella espera paciente el regreso del padre de sus cuatro hijos, ella guarda la ilusión de que algún día se esclarezca el paradero de su pareja, ella tiene la fe en Dios de que pueda darse el milagro, ella es una mujer enferma y desamparada que desde hace casi 7 años aún llora la ausencia de su ser más querido.

“Le pido a Dios que haga el milagro y me dé la dicha de encontrar a mi esposo, él era un padre que quiso darle lo mejor a sus hijos, decidió irse a Estados Unidos para trabajar y comprarnos una casa donde vivir aquí en la comunidad de La Vuelta, me decía que desde niño le gustaban muchos los autos, para eso quería irse a trabajar para el norte, para comprarse un carrito, se fue con las mayores esperanzas de darle lo mejor a sus hijos”, dice al borde del llanto Angélica Moya.

El esposo de Angélica Moya formaba parte de los 31 trabajadores, de los cuales 17 eran migrantes queretanos originarios de Landa de Matamoros que desaparecieron en marzo de 2010, cuando un camión de pasajeros supuestamente los trasladaría del municipio serrano de Landa a la frontera norte del país, de ahí que su esposa Angélica aún guarda una última esperanza de que las autoridades mexicanas logren esclarecer esta masiva desaparición de queretanos, de los que aún se desconoce su paradero y que su desaparición sigue siendo un gran misterio y una investigación aún no esclarecida.

En el norte del país, aquellos  trabajadores migrantes intentaban cruzar la frontera de Estados Unidos en busca de mejores horizontes y con la mayor ilusión de darle a sus familias una mejor calidad de vida, pues Landa de Matamoros según CONEVAL y algunos lugares de la sierra gorda de Querétaro son consideradas zonas de alta marginación; no hay fuentes de trabajo bien remuneradas, el campo ya no produce, entonces cientos de queretanos están emigrando a la Unión Americana tratando de encontrar mejores ingresos para sus familias.

El 17 de marzo de 2010, un camión de pasajeros hizo parada sobre la carretera de Landa de Matamoros a Xilita, ahí en la comunidad de El Lobo, subieron 17 queretanos, pues en el camión ya iban viajando 6 trabajadores del estado de Hidalgo y otros 8 de San Luis Potosi, todos ellos de diferentes comunidades pobres de las zonas serranas de la huasteca potosina e hidalguense.

“Mis hijos y yo lo fuimos a dejar a la carretera que pasa por El Lobo, ahí lo despedimos, el camión ya traía a más personas, aquí subieron 17 landenses, entre jóvenes y señores, recuerdo muy bien que aquella despedida fue para mi muy triste y lo sigo recordando…todos sus hijos le dieron tal vez el último abrazo y beso a su padre… otras familias también despidieron a sus  hijos y esposos, ese día hubo abrazos y llanto, nunca nos imaginamos que jamás los volveríamos a ver”, rememora Angélica cuando la última vez vio a su esposo ahora desaparecido.