Por Jorge Coronel
QUERÉTARO, 14 de noviembre de 2016.- La pregunta no es si asesinarán a un periodista en Querétaro; la interrogante correcta, por más cruel que sea es: ¿Cuándo ejecutarán a un periodista en Querétaro?
Hasta cierto punto la libertad de expresión, la libertad de prensa, ha sido respetada en la entidad. Pero la mayoría de los medios de comunicación están apegados al poder en turno, con sus notables excepciones (algunos espacios en Radio UAQ, algunos sitios en la Internet -como, por ejemplo, VOZ IMPARCIAL-, y los semanarios Tribuna de Querétaro y Libertad de Palabra).
Sin embargo, para el poder siempre hay un límite y no permitirá más que ciertos medios de comunicación locales cumplan con su obligación: la de informar de los abusos de aquél. Pero no sólo incomodar al poder, también a la sociedad en su conjunto para cumplir aquella frase del escritor George Orwell que dice: «Si la libertad significa algo, es el derecho de decirles a los demás lo que no quieren oír».
Así que la probabilidad de un periodista queretano sea asesinado crece, y más tomando en cuenta que la impunidad reina en todo el país. Y todavía más cuando todo parece indicar que gobiernos y crimen organizado son lo mismo.
Ojalá me equivoque y trague mis propias palabras.
