Escenificación de “Las Tres Caídas” en La Valla; 35 años de tradición religiosa

Por Armando Guerra Vázquez

San Juan del Río, Qro.- 15 marzo de 2016.- Junto con la escenificación de La Cañada en El Marqués, “Las Tres Caídas” en la comunidad de La Valla son los dos únicos lugares donde en Querétaro se representan en vivo los actos religiosos de la Semana Santa.

Era 1981 cuando la lejana comunidad rural de La Valla vivía en un abandono total, sus caminos polvorientos y escabrosos hacían que su gente en ese entonces fuera marginada de los programas sociales-gubernamentales, buscando una salida a esos problemas, la mayoría de sus habitantes vivían y se refugiaban en una gran fe católica, valor arraigado que aún sigue vigente en sus costumbres.

Para aquel tiempo, el sacerdote J. Guadalupe Leal Rodríguez identificado como “El Padre Leal” fungía de consejero espiritual de aquellos devotos y sencillos pobladores, por lo que fue éste quien inculcó y convenció a la juventud del lugar para que comenzara a escenificar  -en vivo- las llamadas “Tres Caídas.”

Con el apoyo de uno de sus seminaristas de nombre José Pedro de la Rosa, el reverendo sacerdote comenzó aquella actividad y labor pastoral que a través de los años ha sido ya la admiración del pueblo católico de la región e incluso a nivel nacional.

“Mi hermana Silvia y yo éramos entonces las catequistas del templo, pero un día el Padre “Leal” nos llevó a uno de sus jóvenes que estaban en el seminario para comenzar a estudiar el libreto y hacer en vivo las tres caídas” relata reviviendo el pasado Estela García Prado.

El seminarista José Pedro que estudiaba filosofía en los Estados Unidos, aseguraba que aquel guión lo había logrado gracias a su paso por la comunidad latina católica que habita en la ciudad de Corpus Christi, por lo que esa ciudad norteamericana fue la inspiración inicial de lo que hoy es todo un culto y rito religioso en la aldea de La Valla.

“En la primera edición de la escenificación, hubo muchos errores, recuerdo que el vestuario de los doce apóstoles estaba atrasado, había preocupación porque todavía no nos entregaban las tres enormes cruces de madera, se estaba llegando el día, muchos jóvenes se resistieron en esa época a participar, hoy hasta se pelean un lugar ya cuando menos para desempeñar el papel del cirineo” señala García Prado quien fuera una de las fundadoras y primera participante en este ferviente evento.

En ese año, a las puertas del templo se levantó un tapanco donde aquel grupo de jóvenes actores novatos presentaron su primera escena bíblica: “La Cena del Señor y lavatorio de los pies”, luego en el mismo anexo de la iglesia se improvisó un pequeño huerto con ramas cortadas de algunos árboles; fue ahí donde se revivió el pasaje de “Jesús en el Huerto.”

A través de los años, la escenificación de “Las tres caídas” en La Valla ha tenido algunas mejoras en su recreación, varios lugareños recuerdan cuando el fragmento donde se crucifica a “Jesús en el Calvario” se hizo – inicialmente- durante un corto tiempo casi enfrente de la iglesia –donde hoy se erige el jardín de la comunidad.-

Posteriormente los organizadores y las autoridades eclesiásticas pretendiendo hacer más real las escenas bíblicas, decidieron que “La crucifixión de Jesús” se hiciera en uno de los cerros más cercanos al lugar y así fue como hasta la fecha se ha hecho una costumbre cada año escenificar las tres caídas aquí.