Por Valentín Ruíz
QUERÉTARO, QRO., 6 de mayo de 2018.- Mientras que José Antonio Meade en su visita a Querétaro sostuvo varias reuniones de campaña, Ricardo Anaya solo tuvo un evento masivo en San Juan del Río, pero finalmente se vislumbró el “arrastre” que tuvieron en sus encuentros con su militancia.
Lo que en política se conoce como “chaquetas mentales”, fue lo que proyectaron priístas y panistas en la entidad, pues a los eventos de Meade y Anaya solo se vio a los militantes y simpatizantes que ya NO cambiarán su intención de voto, o sea, asistieron los que votarán por su candidato, nada excepcional en sus mitines.
Sin embargo no podían faltar los funcionarios, candidatos y candidatas a algún puesto de elección, los miembros activos, los y las que van por la reelección, lo que quiere decir que el priísmo queretano y el panismo estatal vitorearon a Meade y Anaya respectivamente, pero a esos ya no era necesario convencer, ellos y ellas ya saben por dónde van sus intereses personales.
Errores de cálculo y chaquetas mentales de priístas y panistas en Querétaro, fue lo que dejó la visita de Meade y Anaya.
Ahora, solo se estará a la espera de ver quiénes abarrotarán los eventos públicos que sostendrá Andrés Manuel López Obrador en Cadereyta de Montes y San Juan del Río el miércoles 9 de mayo, porque si se sigue con la misma línea, se estaría cayendo en el mismo error que los anteriores.
Basta recordarle a políticos y políticas en la entidad que esos eventos son para que los candidatos conquisten al electorado que aún NO ha definido su voto, los que ya lo han hecho, ¿esos para qué?
Pero no quieren faltar, pues no hay cosa más ególatra que ser vistos por el mismo candidato presidencial, porque si gana, no vaya a ser que los dejen fuera de la “repartición” ¿no cree usted?
