Por Agencias
Lázaro Cárdenas, Mich.- 11 de febrero de 2017.- En los momentos en que una reportera realizaba su labor, grabando las quejas que ciudadanos y comerciantes del puerto de Lázaro Cárdenas le exponían directamente, el secretario de Seguridad Pública de Michoacán, Juan Bernardo Corona Martínez, determinó que la trabajadora de los medios no podía realizar su labor, ante lo cual ordenó a sus guaruras quitarle el aparato.
El incidente se suscitó este viernes durante el evento de Instalación de la Comisión Para el Desarrollo de las Zonas Económicas Especiales de la CONAGO, realizado hoy en el puerto de Lázaro Cárdenas.
El funcionario encargado de velar por la seguridad pública de los michoacanos, atendía de manera arrogante a un grupo de personas que llevaban horas esperándolo, y quienes buscaban plantearle la creciente inseguridad en el puerto, a lo que su interlocutor les espetaba que él llevaba prisa y que las quejas que presentaban eran “como las que pasan en muchos lugares”, sin embargo en un momento determinado se compromete a analizar sus demandas al tiempo que los canaliza con una servidora pública.
Y mientras los quejosos le manifestaban al ex diputado plurinominal quien actualmente presume de la gran amistad que lleva con el gobernador Silvano Aureoles, los problemas que a diario afrontan entre secuestros, robos y asaltos, la reportera, Alejandra Martínez realizaba su trabajo, simplemente grabando de voz con su móvil, el encuentro del secretario con los lugareños.
Las quejas de los pobladores iban desde asalto hasta asesinatos e incluso secuestros. La grabación de la reportera da cuenta de lo dicho por los habitantes, muchos de ellos dedicados al comercio.
Sin embargo, en algún momento del encuentro, la persona que funge como enlace de comunicación de la SSP, Sandra Saenz, pone en alerta a su jefe que la comunicadora estaba grabando el diálogo. La advertencia parece que habría tocado fibras muy sensibles del secretario que inmediatamente le reclamó:
-¿Por qué grabas hija?-Porque quiero, porque es libertad de expresión -le responde Martínez, quien en la grabación se muestra forzada porque al parecer le quieren arrebatar el teléfono: “No pueden quitarme el celular” -reclama la comunicadora que se oye forcejeando-.
-A ver, a ver hija -le amenaza el funcionario-: ¿Qué no puedo? ¡¿Qué no puedo?!
-Es libertad de expresión -Le respondió Martínez-.
-¿Que no puedo quitártelo? -le advierte el secretario-.
-Es de mala educación ¿me lo va a quitar (el celular) secretario? Soy reportera -le aclara Martínez- a la vez de recordarle que “ellos (los comerciantes) están denunciado”.
-¿Y? Y yo estoy atendiendo -responde ríspidamente el funcionario-.
-No. No me lo va a quitar -insiste la reportera-.
-Nomás sí te digo (frase inaudible del secretario).
-¿No es amenaza? -Pregunta la reportera.
-No hija yo no amenazo…
Luego la vocera Saenz, que antaño fue reportera de la fuente policiaca, muy apresurada se suma a la discusión: “Ellos están hablando ellos están atendiendo una situación. Vino (el secretario) a atenderlos”.
-Reportera: Precisamente por eso, están denunciando secuestro.
-¿Están denunciando qué? -Pregunta alarmado el secretario, como si no hubiese puesto atención a las quejas de los pobladores.
-Secuestro -reitera la reportera-
-¿Están denunciado qué? -Vuelve a insistir incrédulo el secretario-.
-Secuestro, robos, asaltos.
Entre la discusión, la gente también insiste en sus demandas: “o sea, sí lo hay, se han llevado mucha gente, han matado.
Luego la discusión se centra entre Alejandra Martínez y Sandra Sáenz, quien al parecer le insiste que le entregue el teléfono y/o grabación, pero la reportera se niega:
-Es que no te lo puedo permitir.
-Es que es una cosa privada -le dice Saenz-.
-Es libertad de expresión.
La voz del secretario se oye a lo lejos:
-No abuses.
-Se lo voy a tomar como una amenaza -le dice la reportera.
-Haz lo que tengas que hacer, haz lo que tengas que hacer, no se vale -le dice el secretario-.
