Por Valentín Ruíz
QUERÉTARO, QRO., 5 de noviembre de 2020.- Con tal de lograr sus negras pretensiones de querer seguir anhelando la candidatura al Gobierno de Querétaro, el senador suplente Juan José Jiménez Yáñez fue capaz de mentir tras argumentar que se separaba del cargo de Senador para ir en busca de la Gubernatura queretana.
Y no fue así, tuvo que dejar vacío su curul para que el sí Senador Gilberto Herrera Ruíz volviera a ocupar su silla en la Cámara Alta, y Jiménez Yáñez, “a la banca”.
Pero la ambición desmedida de Juan José Jiménez no tiene límites, pues sin tener una identidad como militante de Morena en la entidad, menos un trabajo partidista propio, sin haber hecho campaña en 2018 con Gilberto Herrera que buscó el voto popular, sin inversión presupuestaria de su peculio y sin siquiera aparecer posicionado en alguna encuesta actual, levanta la mano para ser considerado candidato, lo que ha molestado a los militantes de cepa en Morena Querétaro.
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“Su única suerte fue haber estado en las circunstancias de haber sido el suplente de Gilberto”, le increpan a JJJ Yáñez.
Pero cuando se sintió Senador y empezó a recibir la jugosa dieta de la máxima magistratura del Congreso de la Unión, Jiménez tuvo dinero para pagarse los espectaculares que aún se pueden ver en la capital queretana y en otros municipios, acto que ofende a las familias que “menos tienen” en el estado.
Y ahora, de forma maquiavélica, al menos quiere Jiménez Yáñez estar en la mesa de negociaciones para ver que posición le toca en “la que sigue”, ¿a poco no?
