Por Jorge Coronel
QUERÉTARO, QRO., septiembre 12 de 2019.- Era el domingo 24 de noviembre del 2013 cuando miles de ciudadanos queretanos acudieron al Jardín Guerrero para intentar lograr el número mínimo solicitado para constituirse en partido nacional, ese día no se logró (ver: https://archivo.eluniversal.com.mx/nacion-mexico/2013/morena-no-alcanza-quorum-para-partido-en-queretaro-968081.html); dos semanas después, en un nuevo intento, se consiguió alcanzar el objetivo con más más de 3 mil firmas (ver: https://www.jornada.com.mx/2013/12/09/politica/013n2pol).
Los miles de asistentes a las dos asambleas acudieron por voluntad propia deseando dar vida a un nuevo partido inclinado a la izquierda y esperanzados en que algún día llegase a Los Pinos.
La historia de Morena-Querétaro no ha sido fácil: varios grupos desde su nacimiento se han peleado por detentar el poder.
Ha sido una historia aparentemente exitosa ya que en sus pocos años de vida, a nivel local, ha conseguido un buen número de regidores, diputaciones locales y federales, senadurías y una presidencia municipal.
Y decimos aparente porque mucho de ese éxito se debe, sobre todo, a la arrolladora imagen y popularidad de su líder, el actual Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
A nivel estatal Morena deja mucho que desear en su estructura, en su forma de concebir la política, en el actuar de sus dirigentes y representantes populares (?), etcétera.
Y cómo se ha denunciado en diversas partes, el partido local ha sido secuestrado por tres personajes: uno de ellos aparentemente por fin se fue de Embajador a la República Dominicana después de un desastroso paso por la dirigencia queretana.
Quedan otros dos que ya se están relamiendo los bigotes para seguir manejando el partido a su antojo y ver sólo por sus intereses.
Para octubre del año en curso se anuncia la renovación de consejeros estatales.
Ahí viene la primera oportunidad de recuperar a Morena-Querétaro, de recuperar el espíritu de fraternidad, lucha y esperanza que se gestó en las asambleas del 24 de noviembre de 2013 y del 8 de diciembre también de 2013.
Las bases son las que deben recuperar el espíritu con que nació Morena-Querétaro los días mencionados.
Deberán hacer a un lado a varios dirigentes nefastos que ven al partido como si fuera de su propiedad.
Vienen tiempos nuevos y esperanzadores: ¡La hora de recuperar a Morena-Querétaro ha llegado!
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