Tienen características físicas similares: son de complexión media a delgada y miden entre 1.55 y 1.60 metros, también su situación sentimental es parecida
POR MARÍA DE LOS ÁNGELES VELASCO
CIUDAD DE MÉXICO, 25 de septiembre de 2018.- Nancy Huitrón no ha sido vista desde hace 20 días; Evelyn Rojas salió de su hogar en julio; y Arlet Olguín fue vista por última vez en abril.
Las tres mujeres tienen sus domicilios en la colonia Jardines de Morelos, en el municipio de Ecatepec, en el Estado de México; tienen características físicas similares: son de complexión media a delgada y miden entre 1.55 y 1.60 metros, también su situación sentimental es parecida.
“Tienen similitudes los tres casos, porque son personas que tenían poco de haberse separado, son personas que estaban solas con sus niños, y son morenitas de pelo largo”, comentó María Guadalupe Hernández, mamá de una de las jóvenes desparecidas.
Nancy, de 28 años de edad, desapareció el pasado 6 de septiembre, junto con su pequeña hija Valentina, de dos meses edad.
“Ella fue a dejar a sus hijas a la escuela y de ahí ya no se sabe nada de ella; le hable a una patrulla para que me apoyara en el momento, pero me dijeron que ellos no podían hacer nada, que debían esperar 72 horas para que me pudieran ayudar”, mencionó María Eugenia Solorio, mamá de una de las jóvenes desaparecidas.
Evelyn Rojas, de 29 años de edad, no ha sido vista desde el 26 de julio del 2018; quería trabajar para celebrar el cumpleaños de su hija.
“Salió en la mañana con una supuesta mujer que le iba a vender ropa americana de paca, ella me dijo que va juntar dinero, ella trabajaba para un hombre, un señor judío, ella le maquilaba”, declaró Lilia Matus, mamá de una de las jóvenes desaparecidas.
Arlet, de 24 años edad, tenía una estética; de su negocio, mantenía a sus tres hijos. Tras dejar a su hijo en la escuela, el 25 de abril, no fue vista de nueva cuenta.
“La vio mi hijo a las 9 de la mañana comprando tamales, ese día no trabajé; me llamaron después de la una de la tarde para que fuera a recoger al niño porque no habían ido por él al kínder, voy por él, voy a su casa y encuentro a las niñas comiendo un pedazo de tamal de dulce, mi hija no pensaba dejar a sus hijos y en la parte de abajo una bolsa roja con ropa sucia”, contó María Guadalupe Hernández, mamá de una de las jóvenes desparecidas.
Aunque las jóvenes no se conocían entre sí, las tres vivían en un radio de medio kilómetro a la redonda en la colonia Jardines de Morelos, dos en la sección de Playas y una en la sección de Ríos.
En una segunda entrega, la desaparición de las jóvenes podría estar relacionada con una red de trata manejada por una mujer que les vendía ropa y quesos.
“Yo le diría (a mi hija) que, con todo mi corazón, la estoy esperando; y yo, aunque sea por debajo de las piedras, no voy a descansar hasta encontrarla, se las llevaron decimos nosotros… Vivas se las llevaron, vivas las queremos; yo también espero a mi hija viva”, aseveró Lilia Matus, mamá de una de las jóvenes desaparecidas.
CON INFORMACIÓN DE EXCÉLSIOR.
