Por Valentín Ruíz
ELM ARQUÉS, 30 de agosto de 2018.- Sin respeto alguno a la voluntad ciudadana y aferrándose a la silla de la alcaldía de El Marqués, Mario Calzada Mercado ‘no se quiere ir’. Contrasta su semblante de derrota que manifiesta en los últimos eventos a los que asiste con la indolencia para colaborar en los procesos de entrega-recepción, con la administración entrante.
Al parecer a Mario le ha gustado tanto el poder, que se resiste a soltar el que pudiera ser el último bastión de su partido y de los Calzada en Querétaro. Tan es así, que el ex gobernador José Calzada manipula a su primo, -el aún presidente municipal-, y es quien realmente ha dirigido la toma de decisiones en el municipio de El Marqués.
Una necedad carente de fundamentos ha invadido a Mario Calzada: Primero fue derrotado en las urnas por Enrique Vega Carriles. Después, cuando pidió el recuento de voto por voto, la autoridad electoral ratificó el triunfo del abanderado panista; y como última alternativa Mario recurrió a impugnar la elección en la que presentó débiles argumentos que, seguramente, harán que el Tribunal Electoral del Estado de Querétaro (TEEQ) confirme, una vez más, que el priísta tiene que irse ya.
Lo peor de todo es que ya anunció a través de redes sociales que impugnará en instancias federales; mientras tanto, los ciudadanos y el sector empresarial marquesino tienen que esperar y estar al ‘contentillo’ de un obstinado Mario Calzada, quien obstaculiza y entorpece los trabajos para que la Administración entrante comience a prepararse con el fin de servir a El Marqués.
En una segunda entrega hablaremos de las incongruencias, pretextos y falta de compromiso que la administración actual ha exhibido en detrimento del bienestar de los marquesinos. ¿O acaso estarán haciendo tiempo para esconder la gran cantidad de irregularidades cometidas en este trienio, ya detectadas por la ESFE?
