Por Valentín Ruíz
QUERÉTARO, QRO., 10 de mayo de 2018.- El voto electoral que las urnas reciban el 1° de julio, no serán suficientes para decretar el triunfo de los y las candidatas a un puesto de elección popular, pues las nuevas reglas de la política, obligan a las y los perdedores a impugnar la elección ante tribunales electorales.
No bastará siquiera que quienes triunfen en las urnas y reciban su constancia de mayoría por parte de la autoridad electoral, sean victorias definitivas, pues será un hecho que ante las inminentes impugnaciones, las salas que resuelven el veredicto final de quienes refuten, tendrán mucho trabajo post electoral.
Incluso se llegará la proximidad de la fecha en que tengan que tomar posición los ganadores impugnados y aún existirá gran expectativa para saber el resultado final, así se vislumbra el futuro de las elecciones en Querétaro.
Como clara muestra de lo anterior, es la impugnación que le hicieran a Adolfo Ríos en la capital, y eso que aún no empieza el primer acto de este teatro llamado “política”, siendo el Tribunal Electoral del Estado de Querétaro el organismo que debió definir la primera resolución, y aun así, no dejó contentos a quienes interpusieron el señalamiento.
Finalmente, será a partir del 2 de julio cuando empiece otra campaña que quedará sujeta al criterio de solo unos cuantos, las y los magistrados. ¿No cree usted?
